¿Por qué empecé?
¿Honestamente? Estaba harto. Siempre cansado, con poca energía, y usando cualquier excusa para no moverme. Hasta que un día pensé: esto puede ser mejor. No para parecer un culturista, sino simplemente para sentirme bien. ¿Y esa sensación? Llegó más rápido de lo que pensé.
El Primer Paso: Simplemente Ir
Olvida el horario perfecto o el atuendo ideal. El paso más grande es... salir por la puerta. Mis primeras sesiones fueron desordenadas, no sabía lo que hacía. Pero fui. Y eso es todo lo que importa al principio.
Lo que estoy haciendo ahora
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Esquema dividido: Lunes pecho/tríceps, Miércoles espalda/bíceps, Viernes piernas/hombros.
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Cardio: 2 veces por semana, generalmente HIIT o ciclismo.
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Alimentación: Nada de dietas extremas, solo equilibrio. Muchas proteínas, suficientes verduras, y de vez en cuando algo delicioso.
Lo que he aprendido
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Consistencia > perfección
Hacer algo tres veces por semana es mejor que planearlo seis veces y no ir ninguna. -
Deja el ego en casa
Nadie te está mirando. Todos están ocupados consigo mismos. Comienza ligero, construye con calma. -
El progreso es adictivo
¿Ese primer momento en el que notas que te estás volviendo más fuerte? Mágico.
Tú también puedes hacerlo
No esperes hasta el lunes, el verano o el año nuevo. Empieza pequeño. Simplemente ve. Y si alguna vez te falta motivación: vuelve aquí. Sé lo difícil que puede ser, pero también sé que vale la pena.
